Córdoba.- La situación económica que mantiene la Universidad Veracruzana (UV), obliga a los alumnos a gestionar sus propios recursos para cumplir con los planes de estudio, principalmente en temas como las prácticas de campo.
Aunque el apoyo de la Federación se mantiene, es insuficiente para solventar gastos de mantenimiento de los inmuebles y proyectos escolares.
El director de la Facultad de Ciencias Biológicas y Agropecuarias, Otto Raúl Leyva Ovalle, explicó que aunque en este Ciclo Escolar 2016-2017, el personal está capacitado para realizar una administración cada vez más afectiva, en el manejo de recursos humanos y financieros, la deuda del Gobierno del Estado, que supera los 2 mil millones de pesos, sigue impactando a las diferentes facultades.
En el caso concreto de la Facultad de Ciencias Biológicas y Agropecuarias, lamentó la falta de presupuesto para hacer prácticas, pues no hay pago de gastos para viáticos y mucho menos hay dinero para hacer mantenimiento en las instalaciones, donde con las lluvias resurgieron las filtraciones y goteras, ya que los gastos son extremadamente caros.
En este año, ingresaron un total de 222 alumnos; 112 en Agronomía y 110 en Biología. A pesar de que la oferta académica se mantiene con una matrícula general de 820 alumnos, Leyva, aseguró se han ido acostumbrado a trabajar sin recursos, implementando estrategias que permiten con ese mismo recurso ir priorizando las necesidades.
Desafortunadamente, esta situación obliga a los estudiantes a gestionar y buscar los medios para cumplir con las actividades del programa escolar, por ejemplo, los viajes de práctica que se hacen por parte de los estudiantes de la facultad, donde están basados en el aporte que ellos mismos hacen mediante el comité Pro Mejoras, donde cada estudiante da una cuota opcional de 900 pesos por semestre.
Dicho recurso, insistió que cuando se considera suficiente, se accede a la aplicación de las prácticas y viajes de estudio, en caso contrario se eliminan dichas actividades.
Puesto que, existe el apoyo de la Iniciativa Privada (IP), con quienes se trabaja en proyectos de certificación a cambio de beneficios en especie.
