Orizaba.- El 60 por ciento de las madres jóvenes de entre 16 y 23 años, no practican la lactancia materna para nutrir a sus hijos y prefieren alimentarlos con fórmulas o sustitutos de la leche, lo que provoca riesgos a la salud de los menores.
Así lo dio a conocer la pediatra Eunice Castellanos López, en el marco del Mes de la Lactancia Materna, que se celebra en agosto de cada año.
La especialista explicó que el sobrepeso y la desnutrición, son los principales problemas de salud que padecen los niños que no son alimentados desde el seno materno, esto se debe a que no consumieron las grasas, proteínas, agua y micronutrientes, necesarios para reforzar su sistema digestivo e inmunológico desde el primer día de nacidos.
Lamentó que por ignorancia, las mujeres jóvenes evaden la alimentación con leche materna a sus hijos o la suspenden al poco tiempo de dar a luz, aunque también reconoció que hay quienes no lo hacen por pena, por estética y temor a que se les deformen los senos.
Castellanos López añadió que la lactancia materna ayuda a prevenir muchas infecciones y también permite el crecimiento de niños más sanos, en el aspecto mental y físico, además de que dijo que la lactancia también trae beneficio para la mamá, no sólo en el vínculo afectivo con el pequeño, sino que disminuye la mortandad después del parto, ayuda a bajar de peso y genera una sensación de bienestar para ambos.
La especialista recordó que a los bebés se les debe alimentar con la leche materna exclusivamente, durante los seis primeros meses de vida, sin dar agua, jugos, tés o fórmulas lactantes; detalló que el consejo para una buena práctica, es que las madres coloquen al niño de frente hacia ellas, sostengan el pecho en forma de C, den al infante 20 minutos de cada pecho, saquen el aire y lo dejen descansar por un lapso de dos a tres horas, para volver a darle de comer.
