TOKIO.- El Gobierno japonés ordenó ayer a las Fuerzas de Auto Defensa (Ejército) que se preparen para la posibilidad de derribar un misil que Corea del Norte podría lanzar próximamente, y evitar así que éste impactara en territorio nipón.
El Ejecutivo ha dado esta orden para reforzar la preparación del país, tras los constantes lanzamientos de misiles por Pyongyang, aunque a diferencia de ocasiones anteriores, en que se activaron los sistemas de interceptación, en este caso no se han detectado indicios de una nueva prueba inminente de este tipo.