Orizaba.- El titular del IMSS en la Delegación Veracruz Sur, Jorge Tubilla Velasco, admitió negligencia en la Unidad Médica Familiar Número 1, por la descomposición de 300 vacunas y aseguró que se iniciaron las investigaciones correspondientes para dar con los trabajadores responsables y determinar si fue un hecho intencional o descuido.
Se trata de aproximadamente 300 vacunas, entre ellas antihepatitis y triple viral, las cuales están en cuarentena para que los especialistas de laboratorio las analicen y decidan si se pueden aplicar o no, a los derechohabientes.
Aseguró el delegado que tras el descuido del personal de la Unidad Médica Familiar Número 1 y para evitar riesgos entre los usuarios, se tomaron medidas correctivas y de seguridad, como el cambio de candados de los refrigeradores que contienen las vacunas, el registro en bitácoras y el cambio de supervisores en el área de inmunología.
Tubilla Velasco refirió que se trató de un lote pequeño con un monto de 7 mil pesos, en comparación con las inmunizaciones que se utilizan a nivel delegacional, por lo que negó que se tratara de una afectación mayor, que pusiera en riesgo la salud de los derechohabientes de la zona Centro.
Entrevistado en el auditorio del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (Sntss), durante la entrega de 100 reconocimientos a personal que lleva de 25 a 30 años de servicio, manifestó que con los recortes presupuestales de la Federación, desde hace cinco años el Instituto opera con carencias severas.
Mencionó que los Hospitales de Especialidades que tienen 50 años de haberse creado, como el de Orizaba, se ven afectados con la falta de recursos para el mantenimiento, conservación de las áreas y equipamiento de alta tecnología. Incluso, dijo que el nosocomio de Córdoba requiere remodelación del área de hemodiálisis.
Añadió que actualmente la Delegación Veracruz Sur gestiona la construcción de un hospital en el Sureste del Estado, porque en esa zona ha crecido significativamente el número de usuarios. En cuanto al hospital de Minatitlán, reconoció que es deficiente, obsoleto y requiere de una fuerte inversión para mejorar su equipamiento.
