Orizaba.- Han transcurrido 18 días del secuestro del empresario transportista Guarino Castelán Crivelli y su amigo José Ramón Avelaira Martínez, manteniendo en la angustia e incertidumbre a sus familiares y amigos.
La desaparición de los empresarios sucedió alrededor de las 07:00 horas del pasado lunes 27 de Junio, cuando se disponían a hacer ejercicio en el centro recreativo de los 500 Escalones, luego de arribar al lugar.
Los dos llegaron a bordo de sus respectivas camionetas y las estacionaron en la parte superior. Al descender de sus vehículos fueron interceptados por delincuentes armados que aparentemente ya los tenían vigilados.
Otra versión que se manejó en su momento y que no ha sido ni descartada ni aclarada, es que durante su descenso en el camino a Zoquitlán Viejo, los intervinieron y subieron a bordo de una camioneta.
Dos horas después de su desaparición, fueron reportados a la Policía Municipal, misma que de inmediato implementó un operativo de ubicación y localización por el lugar y zonas aledañas, pero sin éxito alguno.
La psicóloga Martha Avelaira, hermana de José Ramón, denunció la desaparición ante la Unidad Integral de Procuración de Justicia de la Fiscalía Regional del Estado-Distrito Judicial XV.
EL MONTO
De acuerdo a fuentes extraoficiales, los captores solicitaban un pago de entre 5 y 20 millones de pesos. Sin embargo, el monto tampoco fue confirmado por ninguna autoridad o al menos un integrante de la familia.
SIN DECLARACIONES
Luego de que se difundiera la noticia del secuestro del empresario transportista, la familia Castelán Crivelli no ha hecho declaración alguna sobre el tema, manteniéndose herméticos a fin de no poner en riesgo la vida de su familiar y la de su amigo José Ramón.
El exdiputado Víctor Manuel Castelan Crivelli, junto con amigos de su hermano, sólo se presentó al lugar donde se encontraban estacionadas las camionetas y de donde presuntamente fueron privados de su libertad, pero al paso de los días no ha emitido ningún comunicado.
Por su parte, Francisco, Martha y Antonio, hermanos de José Ramón Avelaira Martínez, también se han reservado declarar al respecto, aunque se sabe que se mantienen al pendiente de que su hermano aparezca en los próximos días.
CADENAS DE ORACIÓN
A partir del secuestro de Guarino y José Ramón, surgieron las cadenas de oración en redes sociales por parte de uno de los diversos grupos católicos a los que uno de los secuestrados se encuentra afiliado.
Rezan para que pronto aparezcan con bien, pues al ser dos conocidas personas de la sociedad orizabeña, la incertidumbre y preocupación ha crecido entre la población de la ciudad.
