Orizaba.- La posibilidad de que se registren cierres en el sector restaurantero en Orizaba y la región, ante los incrementos de la gasolina es muy alta, además, la energía eléctrica y productos de la canasta básica en aumento también les afectan, sin dejar de lado el alza al precio del dólar, señaló el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), David Castañeda Roldán.
“Sobre todo, porque si tomamos en cuenta que para el comensal acudir a un restaurante no es de primera necesidad, es una opción para convivir, pasarla bien, por lo que creo que tendremos que buscar una solución muy pertinaz para mantener los empleos”, señaló.
Consideró que para la industria son tiempos difíciles porque todo se mueve con la gasolina, y la energía eléctrica es de suma importancia para las actividades diarias, por lo que son elementos que no se pueden prescindir.
“Tendremos que amortizarlo, hay temporadas en donde se tienen muchos comensales, pero están las que no; debemos considerarlo para ver qué hacemos”, opinó.
Debido a la crisis económica, muchos empresarios del ramo van a replantearse si quieren continuar o cerrar sus puertas, incluso podrían bajar su plantilla laboral, pues a diferencia de los negocios que funcionan de manera irregular, ellos tiene que cumplir con el pago de sus impuestos y de todas las prestaciones de sus trabajadores, por lo que las ganancias son mínimas.
Finalmente, insistió que el incremento en los precios de los productos que ofrecen se tienen que dar, pues con todas estas variaciones en los insumos se verán obligados a reestructurar las condiciones por las que están atravesando.
