EL DESHONOR
Los que han advertido que podrían ser “reventadas” las elecciones internas que el Partido Acción Nacional (PAN) celebrará el próximo fin de semana no se equivocan y las luces de alerta están encendidas en la cancha blanquiazul pues es verdadero el riesgo de que los comicios terminen en violencia. Los interesados en que así sea ya están en la primera fase de la estrategia que es comprar a la militancia que sufragará y para ello, en las últimas horas, desde oficinas gubernamentales y centros de inteligencia han salido maletas repletas de dinero para la compra del voto de los militantes que elegirán a los candidatos a las diputaciones locales y las alcaldías.
Así por ejemplo, del diputado local con licencia y ex presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en el puerto de Veracruz, Óscar Lara Hernández, se ha dicho que le fueron entregados desde Xalapa más de 2.5 millones de pesos para la compra del sufragio y la recolección de credenciales. Lara Hernández compite por la nominación al Ayuntamiento porteño contra el legislador federal con licencia y empresario constructor, Rafael Acosta Croda que es apoyado por el grupo de Miguel Ángel Yunes Linares.
En Boca del Río, dicen los bien enterados, la cifra se duplica, y hasta podría triplicarse en el caso de ser necesario, pues hay un firme interés en impedir que Miguel Ángel Yunes Márquez, hijo de Yunes Linares, sea nominado a la alcaldía boqueña.
Allí son los operadores del abogado Sergio Vaca Archer, aspirante también a esa nominación, los que recibieron las petacas con recursos. En Córdoba es otro sitio donde ya comenzó la danza de los millones. Se habla de ofertas de entre 10 y 15 mil pesos cada miembro activo de Acción Nacional para votar a favor del ex diputado Mauricio Duck Núñez y contra el empresario restaurantero, Tomás Ríos Bernal. Las maletas repletas de dinero suben y bajan en la Ciudad de los Treinta Caballeros donde se comenzaron a repartir “anticipos” por el sufragio o las credenciales de los militantes.
Es todo un espectáculo el que están dando los panistas, tanto los candidatos como los militantes. Por un lado, hay grupos que se tendieron en los brazos del priismo y están siendo subsidiados por el erario estatal y por el otro, los hay que están en los brazos de los yunistas, quienes también le inyectan recursos millonarios al asunto. En tanto, los militantes hacen un peor papel porque aparentemente están cediendo a la tentación y muchos se convirtieron en meros mercaderes, vendiendo su voto al que mejor les pague. Los principios los arrojarán al bote de la basura.
Por eso cuando vuelvan a entonar su himno, más de un panista tendrá que contener la risa al canturrear que buscan “una patria generosa y una vida con honor” pues ni son generosos -salvo en los cañonazos de billetes que actualmente están disparando- ni tienen honor. Y más aún, los “tiranos” que menciona el himno panista no están temblando sino retorciéndose de risa porque los han puesto a competir por un puñado de monedas y servir a intereses inconfesables.
Sin embargo, hay que aclarar que no todos los militantes de Acción Nacional están corrompidos ni poseídos de avaricia. A este espacio han escrito algunos de ellos, mostrando su preocupación por lo que llaman “la triste situación que está viviendo Acción Nacional”, pues una parte de la militancia ha perdido los principios que dieron sustento al partido y éste se llenó de “vividores y sinvergüenzas que han entrado al PAN no buscando servir a la comunidad sino una chamba o hacer un negocio que les resuelva su situación económica de por vida”.
MONEDAS POR VIOLENCIA
Señalan que “la corrupción está a todo lo que da” en el panismo y prueba de ello son los precios de 5, 10 y 15 mil pesos por cada voto comprometido. Un militante que dirigió una carta, que se ha desempeñado como edil y diputado, hace un llamado a sus correligionarios para evitar más vergüenzas en su partido, a que despierten y con su voto detengan a los que usan al PAN para seguir haciendo negocios pese al cuestionado pasado que arrastran. Si Dios no le dio alas a los alacranes, dice, tampoco los panistas deben dárselas sufragando por personajes nefastos.
Pero regresando al tema inicial, parte del dinero de las maletas que han sido entregadas a algunos aspirantes a las alcaldías y diputaciones se ha reservado para la estrategia que se aplicará el día de las votaciones, la cual consiste precisamente en “reventar” el proceso electivo promoviendo la violencia.
Desde la guarida del innombrable se ha ordenado que grupos de militantes e infiltrados recurran a los golpes, gritos y sombrerazos para hacer que las votaciones sean suspendidas o sus resultados estén cuestionados mediáticamente si resulta ganador alguien ajeno a los precandidatos afines al tricolor.
Ya en el puerto de Veracruz los mismos azules han reclamado la presencia de elementos de la Armada de México para contener las andanadas que podrían generarse y lo mismo tendría que hacerse para Boca del Río y Córdoba. Es más, harían bien con solicitar la presencia de paramédicos y ambulancias pues aseguran que los cocolazos -bajo pedido de Palacio de gobierno- estarán de antología. ¿Será posible? ¿Se prestarán los panistas a boicotear sus propios comicios? La respuesta es “sí” porque los recursos repartidos son cuantiosos y muchos panistas tan vendidos que poco les importa el futuro de su instituto.
Ese es el pronóstico de los bien enterados ahora que el reloj azul ya entró en cuenta regresiva para realizar su votación interna. En las horas que quedan no sólo correrá el lodo y carretadas de monedas, billetes, cheques y transferencias bancarias sino también palos, picos, piedras, botellas, espanta-suegras, pica-pica y gas pimienta para el próximo domingo. A la danza de las monedas se endosó la petición para que los azules terminen agarrados del chongo a fin de desprestigiar sus futuros abanderados.
DE VERACRUZ A VENEZUELA
Donde también están de la greña es en Venezuela que el próximo domingo celebrará elecciones presidenciales luego de la muerte del presidente Hugo Chávez. En aquella nación ha causado revuelo la presencia del asesor en marketing electoral, Juan José Rendón Delgado, mejor conocido como JJ Rendón, experto en la llamada “guerra sucia” y que ahora es asesor de cabecera del candidato de la derecha en Venezuela, Henrique Capriles, a cuya sugerencia endureció su discurso contra el abanderado del chavismo, Nicolás Maduro.
Al opositor y heredero del chavismo, Capriles lo ha acusado de vago, mantenido, “enchufado” y otras lindezas. También lo señala de mentir sobre la fecha de muerte de Chávez y sobre todo de que “destruirá al país en sólo 100 días en el caso de llegar a ser presidente”, algo muy parecido a lo que se divulgó en los comicios presidenciales del 2006 cuando acusaron a Andrés Manuel López Obrador de ser “un peligro para México”.
JJ Rendón, también “Rey de las Campañas Negras”, es originario de Venezuela pero salió de su país desde que Hugo Chávez llegó al poder. Ahora está de regreso al lado de la derecha y con todo para derrocar al legado chavismo aunque al parecer no podrá lograr mucho pues los últimos sondeos le dan casi el 80 por ciento de las preferencias al candidato Maduro y anticipan la derrota de su asesorado, Capriles. ¡Ni modo!
El tema de las campañas de lodo no es desconocido por los mexicanos ni por los veracruzanos pues JJ Rendón ha asesorado a políticos como Roberto Madrazo, Elba Esther Gordillo y también al ex gobernante de Veracruz, al innombrable que lo contrató para operar parte de la estrategia mediática de los comicios del 2010 y en especial para enfrentar a su archienemigo, Yunes Linares.
No hay que olvidar que los servicios de JJ Rendón al innombrable incluyeron una supuesta demanda por difamación y daño moral contra Yunes en una corte de Miami, Florida, lo que sirvió para alimentar los golpes mediáticos contra el entonces candidato del PAN a la gubernatura. El pleito entre el innombrable y Yunes, incluido a JJ Rendón y todas sus perversidades, se lo recetaron todos los veracruzanos que terminaron hastiados del lodazal. Ahora los venezolanos están en las mismas.
