Orizaba.- Como un chantaje al que no se debe dar la razón, calificó Román Rodríguez Martín, titular de Comunicación Social y Embellecimiento Urbano del Ayuntamiento, a la huelga de hambre que realizan desde hace 17 días, dos comerciantes ambulantes de Ixhuatlancillo en el parque Apolinar Castillo, por la represión que acusan han sufrido por parte de las autoridades municipales.
En conferencia de prensa vespertina, el funcionario reconoció: “Las vendedoras firmaron las peticiones y después sacaron nuevas peticiones, todos tienen derecho a manifestarse y prueba de ello es que ahí siguen —en el parque Apolinar Castillo—, nosotros cumplimos con la petición original, pero después vinieron con otras peticiones, nos piden 40 lugares en el mercado Melchor Ocampo, pero cuál es el derecho que les asiste que les tengamos que dar los espacios, el Ayuntamiento no va a aceptar chantajes”, aseguró el funcionario.
Esto como parte del posicionamiento que lleva el Ayuntamiento por la huelga de hambre que efectúan José Francisco Nicolás Flores y Bernarda Rosas Sánchez, ambos se encuentran en ayuno desde hace 17 días —con hoy sábado— y podrían estar en un proceso de padecimiento crónico por la falta de comida, en busca de que autoridades les brinden un total de 40 espacios, en tanto el nuevo Mercado de Artesanías de Las Altas Montañas se pudiera acreditar.
Por su parte, se ha solicitado a las autoridades de Protección Civil Municipal tomen conocimiento de los hechos y atiendan con apoyo de médicos, a ambas personas y eviten cualquier problema con su salud, derivado de la falta de alimento. En ese sentido, Antonio Vásquez Sánchez, coordinador del área, confirma en un boletín informativo, que ambos se encuentran estables.
No obstante, Bernarda Rosas Sánchez reconoció tener un retraso menstrual desde el mes de abril, lo cual la mantiene susceptible en este caso, recomendando una prueba de embarazo, por lo que de salir positiva se le pedirá retirarse de la huelga, pues saldría afectado el producto.
Antes de concluir la rueda de prensa, ambos funcionarios confirmaron que seguirán en espera de que los vendedores tomen alguna solución, pero nada que tenga que ver con el respaldo del Ayuntamiento para otorgarles los espacios que requieren en el mercado Melchor Ocampo.
