Orizaba.- La existencia de aserradores clandestinos en los municipios de las faldas del Pico de Orizaba es una realidad, sin que las autoridades competentes como la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) intervengan.
Campesinos que se dedican a la siembra de papa en los municipios de Mariano Escobedo y La Perla, se acercaron a EL BUEN TONO para presentar la denuncia pública que ya han dado a conocer supuestamente a funcionarios, sin que hasta el momento tengan solución, reveló Antonio Arriaga, representante de los comuneros.
Indicó que ellos que viven en las comunidades más apartadas, conocen de la existencia de esos aserraderos clandestinos que furtivamente están acabando con los árboles de las montañas que rodean al volcán.
Exigieron la intervención de funcionarios regionales de la Profepa y de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), pues dijo que en las ciudades creen que son los habitantes los que están acabando con los montes, cuando no es así, sino que gente sube en camionetas a talar los árboles sin que la autoridad tenga sanciones o al menos los detengan.
El representante comunitario también pidió que haya intervención de las autoridades municipales, por medio de sus áreas de ecología y medio ambiente, pues la situación imperante en las comunidades es de poca productividad, en este caso de papa, además del follaje, productos de los cuales mantienen a sus familias.
Informó que no pueden intervenir directamente ellos por seguridad, pues desconocen la procedencia de los trabajadores de los aserraderos clandestinos en las montañas del Pico de Orizaba, los cuales sin medida cortan árboles poniendo en riesgo la vida de esa zona, la cual año con año se va deteriorando en flora y fauna.