ORIZABA.- “Son más de mil 800 hectáreas devastadas en el Parque Nacional Pico de Orizaba, en la zona de La Perla, debido a la impunidad que persiste en virtud de la apatía de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), y la indiferencia del Consejo Estatal Forestal al respecto, el mayor foco rojo en materia ambiental en la región, incluso mantiene una frágil y tensa estabilidad social en dicho parque”, señaló el presidente del Consejo Intermunicipal de Ambientalistas, AC, y delegado distrital de la Federación Agronómica de Veracruz, Graciano Illescas Téllez.
Explicó que la severa deforestación en el Pico de Orizaba, actualmente se encuentra en un abandono del campo y la veda institucional hacia el ecoturismo en zonas indígenas, son algunos de los retos que deberá asumir el nuevo Gobernador de Veracruz, en el marco del Día Mundial del Medio Ambiente.
No obstante, dijo, “hay avances en materia ambiental, tales como la operación del Relleno Sanitario de las Altas Montañas, en Nogales; la administración en la planta de tratamientos Firiob, en Ixtaczoquitlán; el ejercicio del financiamiento hacia la conservación por parte de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), que atiende los dos parques de la región, y la conducción de la delegación Federal de Semarnat en Veracruz”.
Dijo que Sedarpa adeuda 204 millones de pesos al Programa Estratégico de Seguridad Alimentaria (PESA), ejercicio 2015, y la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), ha dejado de apoyar proyectos de ecoturismo en la Sierra de Zongolica, por lo que urge un replanteamiento de sectores.
