Orizaba.- Al menos tres proyectos que pretendían la extracción de 18 pulgadas por segundo de agua, mediante el fracking, pertenecientes a las empresas Coca Cola, Grupo San Roque y Bimbo, han quedado suspendidos en la zona Centro, por afectar directamente a los manantiales y mantos acuíferos que permiten el abastecimiento natural para 280 mil hectáreas de reservas naturales que van desde La Perla hasta Paso del Macho y otras regiones cercanas, perdiendo los afluentes hasta metro y medio de su nivel.
Enedino González Nava, integrante de la agrupación Proderechos Constitucionales AC en defensa del río Atoyac, manifestó que los socavones que se han formado en los últimos meses en zonas alejadas, se deben a la explotación de los subsuelos, que sin medir consecuencias, realizan las empresas en su beneficio, dañando así el sistema de agua que corre naturalmente desde la parte alta de las montañas, lo que llevó a solicitar la cancelación de dichos proyectos.
“Hemos estado vigilando y en los últimos días se han registrado nuevas explosiones en la parte alta y en el afluente perdió metro y medio del nivel del agua.”
“Existe el riesgo de que el río desaparezca si no se cuida, pues por el socavón pasan millones de metros cúbicos y provocará graves problemas donde encuentre una salida, lo hemos declarado varias veces pero tal parece que no hay gran respuesta a lo que sucede en la zona”, informó.
Abundó que el “famoso” fracking contribuye al calentamiento global, pues la explotación del gas acelera el cambio climático, situación que se ha vivido en los últimos días con el llamado fenómeno de La Niña y El Niño, que son muestras fundamentales del daño realizado a la tierra por el abuso y alteraciones.
¿QUÉ ES EL FRACKING?
Se trata de la perforación de un pozo vertical hasta alcanzar zonas que contienen gas o petróleo, partiendo de ello para las horizontales en la lutita, que pueden extenderse por varios kilómetros en diversas direcciones.
A través de estos pozos horizontales se fractura la roca con la inyección de una mezcla de agua, arena y sustancias químicas a elevada presión que provoca fuerza el flujo y salida de los hidrocarburos de los poros.
Pero este flujo disminuye muy pronto, por lo cual es necesario perforar nuevos pozos para mantener la producción de los yacimientos. Por este motivo, la fracturación hidráulica conlleva la ocupación de vastas extensiones de territorio y el deterioro ecológico.
