Acultzingo.- Desde la reubicación de comerciantes de la periferia del mercado Zapata de Orizaba, más de mil campesinos del municipio se quedaron sin un lugar donde vender sus verduras y hortalizas, quienes para prevenir pérdidas tuvieron que recurrir a los coyotes y malbaratar sus cosechas o, incluso, ante su necesidad tienen que deambular en las calles con carretillas y canastas.
La secretaria estatal de Grupos Vulnerables de la CNC, Rubicela Romero Andrade, manifestó lo anterior e indicó que persiste el desinterés de los ayuntamientos de la región por apoyar a quienes viven del campo con la creación de lugares y permisos para que puedan comercializar lo que siembran y cosechan.
“No tenemos dónde expender nuestros productos, esperamos que vengan los coyotes para que los acaparen, llegan y pagan una miseria para revenderlos, pero carecemos de opciones y si se nos quedan se nos echan a perder, eso no sólo lo vivo yo como campesina, sino también todos los compañeros que padecen de la misma situación”, expresó.
Recordó que las calles del mercado Zapata eran la fuente de trabajo para los pequeños productores del municipio y la región, empezó la crisis, cuando hicieron cambios en el lugar.
