Orizaba.- Debido a que la gran mayoría de los padres de familia se ven obligados a trabajar y dejar a sus hijos al cuidado de sus abuelos, o bien porque cuando están con ellos se distraen con el teléfono o la tableta, estos incumplen con la responsabilidad de hacer valer sus derechos.
En el marco de la Semana del Niño, organizada entre las actividades del jardín de niños Amada Beltrán Martínez, los padres de familia y alumnos se dieron cita en la alameda central Francisco Gabilondo Soler Cri-Crí, para hacer matrogimnasia y con ello propiciar un acercamiento afectivo entre padres e hijos.
Al ser entrevistada sobre si realmente se cumple con la misión del bienestar de los derechos de los niños, en el caso de México decretado cada 30 de abril como su día, Elva Rosas Sánchez, directora del jardín de niños, señaló que lamentablemente no ha sucedido así.
“Porque hay padres de familia que se ocupan de otras cosas… como digamos, las materiales y se olvidan de inculcar valores, actividades como es el trabajo, por lo que los pequeñitos del hogar pasan más tiempo solos”.
Además, mencionó que el 20 por ciento se quedan a cargo de los abuelos, personas que los cuidan con mucho amor, pero que ya no tienen las fuerzas físicas para subir y bajar con ellos, sin embargo, tienen la convicción firme de no cometer con ellos los mismos errores que con sus hijos.
“Hay abuelitos que sí se ponen la camiseta —digamos—, como papás, dicen, yo no quiero cometer los mismos errores que cometí con mis hijos”, detalló.
Lamentablemente y ahora con las nuevas tecnologías, comentó que tanto padres de familia como hijos pasan mucho tiempo con sus equipos móviles, tabletas o computadoras, “y se olvidan de los pequeños, a veces no saben ni dónde están, como son niños preescolares, por lo regular son los papás los que están con el celular, los niños jugando, sabrá Dios en qué condiciones”.
Ante ello, comentó que a través de la Escuela de Padres de Familia se busca orientarlos, hacerles ver lo importante de inculcar valores e incluso de rescatar los juegos tradicionales, como es el yo-yo, el avión, el tejo, el stop, la matatena, entre otros, esto para crear lazos, además de enseñarles a los menores una forma diferente y sana de divertirse y aprender.
