Córdoba.- En el marco del Día Mundial del Autismo, el organismo asistencial atiende a 10 niños con este trastorno, ofreciéndoles terapias para su buen desarrollo e integración en la sociedad.
Especialistas del DIF municipal de Córdoba, explicaron cómo encontrar los signos de alerta y cómo detectarlos para tener un adecuado cuidado con los niños que padecen este trastorno, para que desde muy pequeños puedan tener un cuidado especial.
Entre los dos y tres años de edad, se considera que los niños llevan un desarrollo normal cuando repentinamente empiezan a tener un atraso en su forma de comunicación y su lenguaje, haciendo de este algo más notorio.
El estar alerta siempre es primordial, pues en estos niños es muy común que su trastorno se refleje por medio de que el niño no quiera jugar o en este caso, socializar con otros de su edad ya que tienden a aislarse.
Los niños con autismo, dicen que tienen juegos muy específicos y muy comunes de ellos, tales como formar filas, hacer torres en los cuales pueden pasar horas y horas realizando estás actividades, sin embargo; si un adulto o algún otro niño cambia de forma o lugar este juego, el niño con autismo tiende a demostrar un carácter que en algunos casos se puede tornar agresivo.
Las autoridades de la institución exponen que otras de las características de los autistas, es que estos niños emiten sonidos no verbales y movimientos de balanceo cuando se encuentran en estado de tensión, mismo que puede provocar estrés en ellos hasta llegar al grado de los gritos.
Las niñas y niños con autismo que reciben atención en el DIF tienen edades que oscilan entre los cinco y los 13 años, atendidos de manera integral para mejorar sus habilidades de socialización, comunicación, lenguaje y el área afectiva, es decir, facilitar la expresión de sus emociones, con terapias acordes a las necesidades y avances del paciente.
Con la terapia adecuada, muchos de los síntomas se pueden mejorar. La mayoría de las personas con autismo siguen teniendo algunos síntomas durante todas sus vidas, aunque son capaces de vivir con sus familias o en la comunidad.
