Córdoba.- Ex trabajadores de la Casa Hogar Aldea Meced, afirman que desde el inicio de esta administración municipal que encabeza el alcalde Tomás Ríos, la situación en la que opera dicho espacio deja mucho que desear, principalmente ante el aislamiento total al que se somete a los infantes resguardados.
De acuerdo con la ex Coordinadora del lugar- quien solicitó se omita su nombre-, cuando estuvo al frente de la Casa Hogar se buscó mantener un trabajo encaminado a la reintegración de los menores.
Como parte de las acciones recordó que existía una política de puertas abiertas, misma que permitió el acercamiento con grupos como los boys scouts y asociaciones civiles que continuamente le visitaban para realizar la entrega de juguetes, así como para el desarrollo de diversas actividades recreativas y de distracción para los infantes.
Ante la situación que impera actualmente en la Casa Meced, la ex Coordinadora lamentó que el trabajo que se venía realizando ahora ponga en duda el apoyo para el que originalmente se crearon las aldeas, ya que pareciera no hay interés del personal por mezclarse con los problemas de las Casas Hogares, al considerar que por ser niños de familias conflictivas o de la calle no merecen atención especial.
Lamentó se haya perdido el sentido de la integración, pues con la nueva indicación de restricción de acceso pone en duda el buen estado en que se desarrollan los infantes, donde se debe enteder que por criterio “si no te permiten ver algo es porque puede haber algo turbio”. Ante la noticia del fallecimiento de una menor de 12 años al interior de Casa Meced, así como de los señalamientos de los vecinos sobre situaciones de violencia y especulaciones ante castigos severos y descuidos, la ex trabajadora fue tajante y reiteró que en las administraciones anteriores no hubo señalamientos similares, ya que en definitiva lo que se buscaba era una verdadera reintegración de los infantes.
Ante casos que ameritan atención especial, indicó es necesario sean remitidos a instancias capacitadas, principalmente porque aunque durante su estadía como Coordinadora todo el personal en contacto con los niños debía ser titulado y profesionista en Educación y Psicología, cuando se trata de un caso de discapacidad se debe contar con personal adecuado, como sucedió con Rafita- quien abandonó Casa Meced para ser trasladado a Coscomatepec.