Coscomatepec.- Los problemas entre taxistas rurales continúan y los conflictos de vialidad vuelven a la avenida principal Nicolás Bravo de esta ciudad, donde a la autoridad de Comercio municipal y de Tránsito del Estado, poco les importa a estos concesionarios y tolerados, instalándose como se les “antoja” para hacer sitio en esta avenida a partir de la calle Melchor Ocampo.
Después de que suscitara un problema entre taxistas rurales de comunidades de Cuiyachapa y Tetelcingo, donde llegaron a los golpes durante la semana, lesionándose entre ellos e incluso a un oficial de transporte público, un total de 20 unidades que prestan servicio en modalidad de taxi rural se dirigieron a la ciudad de Xalapa para tratar de dialogar con alguna autoridad de Transporte Público estatal.
Sin embargo, de dicha reunión no se ha sabido nada ante el hermetismo de los mismos taxistas que se molestaron con medios de comunicación por plasmar los hechos ocurridos la semana pasada, en que no les importó la autoridad e hicieron desmanes alrededor de la comandancia municipal.
Trascendió que el pasado viernes, el dirigente de estos taxistas, Rogelio Martínez Barojas, en compañía de alrededor de 20 concesionarios y permisionarios, antes de entrar a la capital del estado, fueron detenidos por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, los cuales dialogaron con ellos y a su vez, no dejaron entrar a Xalapa a los molestos taxistas, sólo una comisión de tres personas a bordo de una unidad de SSP de la división de transporte público.
Este lunes, en una aparente calma, algunos taxistas laboraron de manera normal y haciendo sitio donde les correspondía, mientras que otros sin importarle nada, se colocaron donde quisieron e incluso en doble filas.
El temor de los agentes viales fue tanto, que sólo por ocasiones y cuando no veían peligro, coordinaban la vialidad y les pedían a los conductores circular o liberar el paso, sin embargo, el sitio que mantuvieron en diferentes puntos fue el que ellos quisieron.
Mauricio Láinez V.
El Buen Tono
