Córdoba.- A pesar de los constantes señalamientos por abuso de autoridad y corrupción en contra de elementos de Tránsito, y de su propio director, siguen en esta dependencia.
Óscar Barquet Viñas al ser entrevistado con respecto a las patrullas y motopatrullas que circulan sin placas, respondió “Yo trabajo de acuerdo a las herramientas que me dan”.
Tal situación de abuso de autoridad fue puesta a la opinión pública por el automovilista Rafael Ruiz quien lamentó que los agentes de Tránsito municipales quieran aplicar la ley, cuando viven fuera de la misma, al no portar placas de circulación.
“En Córdoba no se respetan las leyes, aquí no aplica el dicho de que el buen juez por su casa empieza, además los agentes actúan de manera prepotente, y se ampararan diciendo que si tenemos alguna queja se los digamos a su jefe (Barquet)”, comentó el automovilista.
Y es que el pasado 9 de marzo mientras Rafael Ruiz circulaba sobre la avenida 3 y calle 9, el agente de Tránsito Diego Colina le marcó la parada, esto al no portar su cinturón de seguridad.
Fue ahí cuando el automovilista se percató que el oficial de Tránsito a bordo de la moto patrulla número 18 circulaba sin sus placas de circulación, por un momento prefirió no argumentar nada, sin embargo, al ver la prepotencia con la reaccionó el oficial, le sacó en cara que cómo es posible que quieran aplicar la ley cuando viven fuera de ella, al no portar placas de circulación.
Otro acto de
corrupción
De forma descarada y sin ningún temor a ser sancionados, Agentes de Tránsito Municipal, se dedican a extorsionar a cuanto conductor que, por alguna razón o causa ajena a su voluntad, no llevan consigo algún documento de su unidad, aunque estos permiten y fomentan el apartado de lugares, estacionamiento en doble fila, uso de espacio para discapacitados, cuando se presenta la “oportunidad” de obtener un dinero extra, no lo dudan ni tantito, tal y como lo ocurrido a un conductor detenido en la calle 9 entre avenidas 7 y 9, quien tuvo que ofrecer su “mordida para el refresco” para poder seguir su camino.
Lamentablemente los cordobeses no contamos con autoridades confiables que garanticen su resguardo, cuando no son policías involucrados en robo son agentes viales corruptos.
Ricardo Jácome Z.
El Buen Tono
