Amatlán.- El penal de mediana seguridad La Toma, tiene un margen de 144 espacios, debido a que sólo tiene mil seis internos aún cuando las instalaciones tienen capacidad para mil 150 reclusos, reconoció el director, Enrique Muñoz.
De los mil seis internos unos 90 son mujeres, los que aseguró ni ellos ni sus familiares tienen privilegios para evitar irregularidades al interior, a fin de mantener un control interno con el apoyo de los custodios y vigilancia de la entrada como del interior del penal.
Con el apoyo de 150 custodios vigilan a los internos, en promedio a cada uno le corresponden siete internos, los que están recluidos algunos recientemente y otros por varios años, mismos que están expuestos a una rotación de forma sorpresiva, como medida preventiva.
Entre las cosas que no permiten a los internos como a las visitas, manifestó es el ingreso de celular, además de que las mujeres no pueden portar aretes, pantalón beige o negro; los varones no pueden introducir cinturón, no portar botas ni sombrero, así como tampoco pantalón beige o negro, entre otras medidas de seguridad.
Actualmente cambiaron protocolo para la comida que llevan las visitas, debido a que anteriormente permitían que los familiares dejaran alimento a los internos, pero a partir de ahora ya no, menos aún ante el proceso de certificación.