Ixtaczoquitlán.- Un rotundo no fue el que exclamaron cientos de campesinos ante la construcción del periférico de ocho carriles que cruzaría el municipio, dañando cientos de hectáreas productivas, desapareciendo la flora y fauna de la zona, lo cual se ha convertido -dijeron- en un estorbo para la modernización de las vías de comunicación.
Enumeraron que entre algunos de los daños se encuentran: Extinción del patrimonio arquitectónico, daños irreversibles en la agricultura, contaminación de nacimientos de agua y eliminación de vegetación en la ex Hacienda, así como la pérdida económica a unos 500 pobladores dedicados a la siembra de chayote, caña y maíz.
Luis Jorge Trujillo Reyes, ambientalista de Ixtaczoquitlán, así como el suplente del Comisariado ejidal, Antonio Báez Guerra, confirmaron la presencia de trabajadores de una empresa privada que han llegado a la zona sin permiso ni notificación a sus predios, anunciando bajo amenazas que de no vender a 3 pesos el metro de sus tierras serán despojados.
Reunidos con funcionarios públicos, exigieron que los defiendan porque no quieren vender sus terrenos a bajo costo, y si lo hacen que sea conforme al valor catastral, “hay organizaciones que están apoyando por el impacto del medio ambiente y denuncian la falta de notificación de los gobiernos federal, estatal y municipal”, insistieron.
Luego de más de dos horas de diálogo -sin resultados- se reafirmó el rotundo no a la creación del periférico, el Frente de Resistencia contra dicha obra que comprende de Orizaba-Córdoba, impedirá que se desarrolle el proyecto carretero.