ORIZABA.- Luego de la prohibición que interpuso el Ayuntamiento local para evitar que las llamadas canasteras comercializarán sus productos, estos primeros días del año las vendedoras se han dejado ver en el corredor turístico de la calle Madero y la Catedral.
Fernando Ortiz Montes, líder de al menos más de 70 canasteras, que trabajan en Orizaba, destacó que luego de anunciar la reunión con el Alcalde de la ciudad, de la cual no ha sabido nada, no han acordado sobre el asunto y la represión de la que son objeto las comerciantes.
Al respecto del tema, estos primeros 20 días del año por las principales calles de Orizaba se ha detectado la presencia de grupos de canasteras, así como en el corredor turístico de la calle Francisco I. Madero y la zona de la Catedral donde se han observado al menos unas siete personas vendiendo en la vía pública.
No obstante, ninguna autoridad se ha pronunciado por dar una postura sobre el asunto de las canasteras, que a decir verdad son una joya del Pueblo Mágico.
La Policía vio a las vendedoras a quienes las pasó por alto, sin exigirles se movieran de las zonas donde fueron encontradas, es decir, a mujeres comercializando comida y hasta juguetes en el área de la Catedral, mismas que volvieron a hacer acto de presencia ante la tolerancia de las autoridades locales, lo cual fue bien visto por la población de Orizaba.
“Las llamadas canasteras son una joya de la ciudad y revisten el Pueblo Mágico”, destacaron estudiantes de administración de la UV, quienes disfrutaban su estancia en el parque Apolinar Castillo de Orizaba.
Cabe hacer mención que la mayoría de las personas que comercializan productos en la ciudad de Orizaba son gente de escasos recursos económicos, que obtiene quizás 100 pesos por día sobre los productos que ofrecen, además de que en su gran mayoría son mujeres que son el único sostén de su núcleo familiar.