Cd. de México.– Cuatro días después de que el actor Sean Penn se reunió con Joaquín Archivaldo El Chapo Guzmán en octubre, helicópteros de la Marina Armada de México alcanzaron el escondite del narcotraficante en las montañas de la Sierra Madre, revela un reportaje de Joshua Partlow en The Washington Post.
El texto dice que poco después del encuentro con el actor, en el que además estuvo la actriz mexicana Kate del Castillo, los elementos de la Marina realizaron un ataque sorpresivo en el poblado conocido como El Limón. Guzmán Loera logró escapar. “Pero los residentes que viven temerosos en los bosques, abajo, no fueron tan suertudos”.
El diario norteamericano detalla algunos de los episodios conocidos y denunciados de abuso contra la población civil, pero agrega otros. De acuerdo con el Times, las fuerzas federales realizaron algo parecido “a un castigo colectivo”, disparando y robando a la población.
“Los marinos perforaron casas y camionetas con disparos, prendieron fuego a cuatrimotos y robaron dinero, joyas, cobijas y ropa, de acuerdo con los residentes”, afirma The Washington Post.
Muchas de estas denuncias fueron exhibidas por organismos de derechos humanos en Sinaloa el pasado mes de octubre. Medios como Noroeste, Sin Embargo o Vice Media, lo dieron a conocer en su momento.
“Nada menos que 250 familias, casi mil personas, huyeron a las montañas en busca de seguridad. Llegaron a la ciudad más cercana, Cosalá, a partir del 9 de octubre”, dice el reportaje.
La publicación detalla que el Gobierno mexicano descalifica las acusaciones de violaciones a los derechos humanos que comete la Marina diciendo que son infundadas. “Un funcionario mexicano dijo que El Chapo manipula a sus seguidores a hacer tales afirmaciones con el fin de mantener a los militares fuera de esta zona productora de drogas del estado de Durango”, indica la nota.
Sin embargo, añade el texto, la narración de 16 residentes de comunidades alejadas describen el tiroteo lanzado desde helicópteros y el ingreso violento a ese lugar.
“Algunos entrevistados muestran los daños a sus propiedades, agujeros de bala visibles en sus casas y vehículos”, se menciona.
El diario señala que en esa zona de la ciudad colonial de Cosalá, la carretera es un camino empinado, lleno de baches, accesible sólo en cuatrimotos. “El territorio se extiende a los estados de Chihuahua y Sinaloa, lo que se conoce como el ‘Triángulo Dorado’, la base de operaciones del Cártel de Sinaloa, cuyo líder es Guzmán Loera. Muchos de los campesinos confían más en el narcotraficante que en el propio Gobierno”, dice el texto.