Río Blanco.- El puente vehicular de Vicente Guerrero se convirtió en un problema para cientos de habitantes de San Cristóbal, porque los dejó sin una entrada por este municipio, y la que existe, la utilizan en sentido contrario, lo que representa un peligro para los conductores y principalmente peatones.
Ante dicha situación, las personas siguen atravesando por la vía, y aunque la obra otorga mayor fluidez al tránsito vehicular que ingresa o sale hacia la autopista, y ya no se forman congestionamientos por el paso del ferrocarril, representa un riesgo para quienes tienen sus viviendas en Paso Carretas.
Al respecto, algunas personas dijeron que la vialidad por abajo de la estructura se realiza como un retorno hacia el Hospital Regional
“Vivo en Paso Carretas, frente al nosocomio, trabajo en Mendoza, por lo que todos los días tengo que salir por el puente, lo que es peor, al no existir una lateral adecuada ni semáforo que nos incorpore hacia Río Blanco, debo de pasar frente al puente”, expresó Rogelio Sánchez, de oficio pailero.
Consideró que los encargados del trabajo no pensaron en quienes viven en San Cristóbal, “de regreso es igual, tengo que entrar por la lateral, darle vuelta al retorno y seguir en sentido contrario, pasar por la vía y exponerme al tren, porque el espacio es reducido, pero no hay de otra, ya nada se puede hacer”.