Washington.- El presidente de EU, Barack Obama, advirtió a los líderes del Estado Islámico (EI), que “no se pueden esconder” porque son el principal objetivo de la campaña militar contra el grupo yihadista en Irak y Siria, al defender de nuevo su estrategia.
Obama sostuvo, en una declaración desde el Departamento de Defensa, que esa estrategia “continúa avanzando” con “un gran sentido de urgencia”, aunque admitió que el combate a los yihadistas seguirá siendo “difícil”.
Según Obama, la coalición internacional de 65 países liderada por EU y formada el año pasado para combatir al EI está golpeando “más fuerte que nunca” a los yihadistas.
“Los líderes del EI no se pueden esconder y nuestro mensaje para ellos es simple: son los siguientes”, subrayó el Presidente, tras reunirse en el Pentágono con su Consejo de Seguridad Nacional.
Obama anunció que su Secretario de Defensa, Ashton Carter, viajará a Oriente Medio para tratar de aumentar las contribuciones de esos países a la campaña militar de la coalición internacional contra el Estado Islámico.
El Presidente dijo que recientemente, antes de los ataques terroristas de París y de la matanza de la localidad californiana de San Bernardino, ordenó varios cambios a la estrategia contra los yihadistas, entre ellos la presencia de fuerzas especiales de EU, sobre las que afirmó que están jugando “un papel vital”.
Además, Obama detalló que en noviembre se han lanzado “más bombas” contra objetivos del EI que en ningún otro mes desde que comenzó la campaña militar a mediados de 2014.
El mandatario precisó que los yihadistas han perdido un 40 por ciento del territorio que controlaban en Irak.
Tras los atentados del 13 de noviembre en París, que causaron al menos 130 muertos, y la masacre del 2 de diciembre en San Bernardino perpetrada por supuestos seguidores del EI, que dejó 14 fallecidos, Obama se ha mantenido firme en la defensa de su estrategia contra los yihadistas.
En un discurso a la nación hace ocho días, Obama reiteró su plan de bombardeos aéreos, el despliegue de fuerzas especiales y el entrenamiento y asesoramiento a las fuerzas locales que combaten a los yihadistas, e insistió en que no enviará soldados a luchar sobre el terreno.