ORIZABA.- Al párroco Helkyn Enríquez Báez, vocero de la Diócesis, se le pidió su punto de vista a nombre de la Iglesia Católica y expectativas sobre el informe del gobernador Javier Duarte de Ochoa y el exhorto para lo que resta del mandato, a lo que el Sacerdote consideró que “los veracruzanos tenemos derecho a no heredar un estado endeudado”.
En primer lugar, dijo el Vocero Diocesano, “la expectativa no está fundada en ningún hombre sino en Jesucristo, porque los hombres nos defraudan y como institución lo que se espera es que cumpla el Gobierno lo prometido y se manifieste la intención para acabar con los todos pendientes”.
Al respecto, insistió que la expectativa de la Iglesia Católica básicamente de los ciudadanos, es que se cumpla todo.
Además refirió que se manifieste la intención de un estado de derecho donde se promueva el bien común, se realice lo que impulsó como plataforma política, buscando el beneficio de quienes requieren atención inmediata a sus justas demandas de seguridad, educación y vías de comunicación, por citar ejemplos.
Y como falta mucho por hacer, sin duda, Enríquez Báez manifestó que no basta con decir lo realizado sino comprometerse a todo por los veracruzanos.
“Uno de los aspectos que más inquieta a la sociedad es la deuda que enfrenta el Gobierno del Estado, sería muy importante que pague a sus acreedores y sobre todo que tenemos derecho a no heredar un estado con deudas”, enfatizó.
Sobre la violencia
Por otro lado, el Vocero Diocesano también se refirió a la violencia suscitada en Europa, “la justicia y paz son valores que los cristianos deben asumir para impregnar al mundo esta actitud. En primer lugar, descubrir qué es lo que provoca la violencia, en el caso de México, la corrupción y el narcotráfico la causan”, aseveró en conferencia de prensa ayer domingo.
Sobre los atentados en Siria y Francia, dijo que tiene una motivación religiosa de fanatismo, “por lo que toca a los cristianos se debe trabajar en nuestro país por la justicia, evitar la corrupción y denunciar la injusticia para crear un ambiente que purifique a la Nación y se genere paz”.
Enríquez Báez expresó que “en casos donde las personas son perseguidas y el fanatismo ha provocado la muerte, al cristiano le toca no responder odio con odio sino con perdón y paz, de lo contrario se entra en la misma lógica y el odio crece logrando su finalidad”.