compitió, fue mejor por grandes lapsos del partido pero los errores se pagaron caros. Muy lejos quedó aquella disparidad de hace un par de años, el Tri Sub-17 le plantó gran cara al combinado nigeriano aunque al final terminó cayendo 2-4 para tener que conformarse con el
duelo por el tercer puesto del Mundial de Chile 2015. Claro está que México es potencia de sobra. Nigeria es quizás el único combinado que puede hacerle sombra y viceversa, pues los únicos pasajes, en toda la Copa del Mundo en los que los africanos se vieron en aprietos fue ante México.
Mientras la contundencia no estuvo del lado mexicano, Nigeria se encargó de demostrar el por qué de su dominio en la categoría.
México fue el primero en hacer daño cuando Kevin Magaña aprovechó las claras deficiencias en la defensa de Nigeria para bajar el balón con el pecho y luego disparar de pierna derecha fusilando al portero Udoh con una pelota milimétricamente colocada junto al poste.
Entonces vinieron la cascada de errores, la gran mayoría a la ofensiva de México; Nigeria le dio la vuelta al marcador, en el segundo lapso Diego Cortés anotó un golazo driblando a rivales para el 2-2, pero los africanos no aflojaron y se pusieron rápido arriba y acrecentaron la diferencia a 4-2, para asegurar su pase a la final de este Mundial y así acabar una vez más con el sueño del Tri para ser campeón.