CD. Mendoza.- Luego de volver de viaje, un empleado arribó a su domicilio y se percató de que el portón de la entrada principal estaba entreabierto, por lo que al ingresar al inmueble observó sorprendido como sus muebles y demás artículos se encontraba regados por todo el lugar, además de que las puertas de las habitaciones estaban abiertas.
Tras revisar en su cuarto, el hombre se dio cuenta de que habían sido sustraídas de un mueble joyas y demás pertenencias, motivo por el cual concluyó que había sido víctima de un robo, por lo cual decidió acudir ante la Agencia del Ministerio Público para denunciar estos hechos.
A través de su querella, Martín Alejandro Benítez Guzmán, de 63 años, quien es vecino de la colonia Emilio Carranza de Nogales, señaló que el atraco del que fue víctima ocurrió la noche del pasado lunes, cuando luego de regresar de la ciudad de Puebla, se dirigió a su domicilio junto con su esposa Alma Adriana Poceros.
Como se mencionó anteriormente, el agraviado observó con extrañeza que el portón de la entrada estaba abierto, por lo que de inmediato entró a la casa para ver de lo que se trataba, señalando que ropa, muebles y demás objetos se encontraba tirados en el lugar, además de que las protecciones de una de las ventanas había sido cortada.
Tras revisar en el resto del domicilio, Benítez Guzmán se dio cuenta de que una escalera estaba puesta sobre la azotea, por donde se presume el o los presuntos delincuentes habrían ingresado a la propiedad para cometer el robo, apoderándose de diversa joyería de oro y de varios relojes finos que tenía guardados en su habitación.
De igual forma el denunciante refirió mediante su denuncia que fueron sustraídos 150 dólares que su esposa Alma Adriana guardaba en un mueble, motivo por el cual decidió acudir a la Agencia del Ministerio Público para presentar su denuncia en contra de quien o quienes resulten responsables por el delito de robo, cometido en agravio de su patrimonio.
Además de esto, Alejandro Benítez pidió a las autoridades que se investiguen estos hechos, ya que los sujetos que ingresaron a su domicilio causaron daños a las protecciones de dos ventanas, también forzaron el portón de la entrada y diversos muebles, eso sin contar el valor de las pertenencias que le fueron robadas, las cuales no fueron cuantificadas por los agraviados ante las autoridades.