Acultzingo.- El nacimiento de agua de Aguaxinola que abastece a cerca de 700 familias lo empezaron a contaminar habitantes que pretenden transformarlo en un centro recreativo, sin tomar en cuenta que se trata de un predio de uso común para los ejidatarios, manifestó con documentos en mano la señora Irinea Pérez Ruiz.
En representación de los afectados, indicó que para solucionar el conflicto solicitó, sin éxito, desde el pasado 28 de mayo la intervención del síndico, Cándido Carrillo Altamirano y levantó el 6 de agosto un acta circunstancia con número 026/2015/CM en la Fiscalía Investigadora de Ciudad Mendoza contra René Arenas Clemente, a quien señalo de amenazarla por defender las presas que benefician a toda la localidad.
“Hay personas que se sienten con mucha capacidad, son prepotentes y groseras, nos agredieron por defender el nacimiento de gua con el que quieren lucrar”, expresó.
Dio a conocer que Antonino Ramírez, Juana Flores y Angela Báez, son quienes representan a los demás para que los perjudiquen en su derecho del 3.704 por ciento que tiene cada ejidatario de esas tierras de uso común en donde nace el líquido para el consumo humano y uso agrícola.
Explicó que a pesar de que el artículo 86 del Reglamento Interno del Ejido de Aguaxinola, que firmaron todos los interesados en 1997, establece que las tierras de uso social deben utilizarse en común acuerdo por los propietarios, y que en los manantiales existentes está prohibido bañarse y utilizarlos como centros recreativos, los ciudadanos referidos pretenden sacar provechos para instalar puestos de alimentos y cobrar la entrada para nadar, aunque esto último ya lo comenzaron a permitir desde inicios del presente año.
Incluso, Pérez Ruiz, mostró un documento que expidió el médico encargado del Centro de Salud de Rancho Viejo en donde especifica que el mal uso como balneario del manantial y la contaminación de las aguas causa riesgos sanitarios en quienes la ingieren, como infecciones gastrointestinales, dérmicas, hepatitis y cólera.