Washington.– La CIDH expresó su preocupación por las señales de que México no le permitirá interrogar a los soldados que estaban destacados en la zona cuando desaparecieron 43 normalistas de Ayotzinapa, y aseguró que quienes deben tomar esa decisión son “las autoridades civiles” y no las militares.
El Secretario de la Defensa Nacional de México, Salvador Cienfuegos, dijo que los soldados que estuvieron en la zona cuando se produjo la desaparición en septiembre de 2014 “no tienen por qué declarar” ante el grupo de expertos de la CIDH que investiga los hechos, porque sólo responden ante “las autoridades mexicanas”.
“Yo he estado en la posición de que no tienen por qué declarar los soldados. Primero porque no hay un señalamiento claro de algún involucramiento. Nosotros solamente respondemos a las autoridades ministeriales mexicanas. El convenio que hace el Gobierno de la República con la Comisión Interamericana (de Derechos Humanos), en ningún momento dice que pueden interrogar. No es posible, las leyes no lo permiten. No me queda claro ni puedo permitir que interroguen a mis soldados que no cometieron hasta ahorita ningún delito, ¿qué quieren saber?, ¿qué sabían los soldados?, está todo declarado. Yo no puedo permitir que a los soldados los traten como criminales”, dijo Cienfuegos Zepeda.
Cuestionado al respecto, el secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Emilio Álvarez Icaza, aseguró que esa posición mostrada por Cienfuegos “no es usual” y que le “llamó la atención”.
“Por supuesto que preocupa que el secretario de la Defensa diga que no va a haber acceso” a los militares, afirmó Álvarez Icaza en una conferencia de prensa en Washington.
Añadió que la Comisión “va a insistir en que el grupo tenga acceso al batallón de Iguala” porque “considera que es una entrevista que se tiene que hacer, y así lo ha respaldado el alto comisionado” de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein.