Celebran al mercado Ocampo

ORIZABA.- Ayer fue un día especial en el mercado Melchor Ocampo, sus 727 locatarios celebraron el 117 aniversario del lugar, uno de los que abre los 365 días del año y tiene de todo, es conocido también como el zoco de las hierbas tanto comestibles como medicinales.

 

El Ocampo el más antiguo de la ciudad, se ha caracterizado por vender lo que no se encuentra en los súper e incluso en otros mercados de Orizaba.

 

Los 25 puestos de hierbas medicinales siguen siendo la tradición y la mayor parte de la clientela es de municipios de la zona conurbada.

 

El auge por la venta de hierbas, según consumidores, es porque dan esperanza de vida a generaciones y que por tradición las abuelas compran de todo.

 

Los dueños de los puestos no son doctores, pero tienen la medicina y la asesoría para hacer los remedios porque muchas personas no tienen 300 pesos para una consulta, por ejemplo, dijo la coordinadora de mercados de la ciudad, Angélica López Abad.

 

“Si vienes y planteas el problema que tienes de salud ellos ya saben qué te van a recomendar como remedio natural, son una gran tradición”, explicaron.

 

En tanto, uno de los negocios que vende productos para envolver barbacoa, por ejemplo, lo atiende Armando Espinoza, lector de EL BUEN TONO, quien además ofrece ingredientes naturales para elaborar los platillos de la región.

 

Tlanepa, hoja de plátano para tamales rancheros o jarochos, hoja de maíz para tamales cernidos, huevos (criollos), de guajolota y de pata, miel de abeja, entre otros, son la principal demanda de las amas de casa en el puesto de don Armando, cuyos proveedores vienen del estado de Puebla y algunos municipios veracruzanos, pero sus compradores son de toda la región.

 

Por la antigüedad del edificio es urgente su mantenimiento no cabe duda, sin embargo, para ello se requiere la ayuda de los locatarios e inclusive que fuera iniciativa suya.

 

Cada locatario paga cincuenta centavos diarios, es decir 15 pesos al mes y el Ayuntamiento les resuelve el servicio de limpia pública, energía eléctrica y hasta de seguridad.

 

Ese monto es la renta mensual por tener un puesto en los 10 mil metros cuadrados de extensión de este mercado, no hay ningún negocio en la ciudad que abra todos los días y pague esta cuota y mucho menos en pleno centro de la ciudad.

 

Este es el lugar a donde los comerciantes llegan cuando aparece el sol y se van cuando sale la luna.