Destraban conflicto

Tehuipango.- Con la presencia del Secretario Canciller de la Diócesis de Orizaba y el Decano de Zongolica, quedó destrabado el conflicto entre los dos grupos de ciudadanos de esta comunidad parroquial.

 

Este sábado a mediodía se hará la entrega de la imagen religiosa que reclaman, de ser posible en una misa, de la que se ha privado al pueblo durante una semana en que un grupo de personas ha impedido la realización de actividades en la parroquia, “llevamos cuatro días sin la santa misa y tampoco hay sacerdote”, expresaron algunas catequistas y madres de familia.

 

En tanto, al filo de las 12:00 del día y hasta la tarde, los sacerdotes Alejandro Cruz Márquez y Camerino Cosme Carrillo, secretario canciller y decano de Zongolica, respectivamente, escucharon el pliego de más de 20 peticiones de quienes tienen detenidos los servicios de la parroquia.

 

La mayoría de las conversaciones, las exposiciones y exigencias se desarrollaban en su lengua madre, el Náhuatl, y lo explicaba en español Camerino Cosme, quien domina perfectamente la lengua madre de esta región.

 

De forma recurrente llamaba a los presentes a llevar el diálogo y sus exposiciones en un ambiente de paz, a no pelearse ni dividirse, recordándoles que si es su fe la que los mantiene unidos en estos reclamos, también deben valorar los aspectos positivos en que han crecido como comunidad, según usos y costumbres.

 

Francisco Chipahua Panzo, quien leyó las solicitudes que dirigen al obispo Eduardo Cervantes, presentó un pliego con cerca de 20 puntos y apoyado por algunos profesores se dirigieron con respeto a las autoridades diocesanas.

 

Sobre sus demandas planteadas no hubo respuesta inmediata, porque las autoridades llegaron a escuchar sus inquietudes y a formular un informe para el Obispo, quien tomará las decisiones que considere pertinentes; una de las respuestas se formaliza hoy al medio día cuando reciban la imagen.

 

Además reconocieron, como lo indica el Derecho Canónico, Lidio Limón continuará como sacerdote, mientras no se indique lo contrario por parte del actual obispo Eduardo Cervantes Merino.

 

La Diócesis de Orizaba reconoció en un comunicado la disponibilidad de todas las partes en conflicto para una solución justa y pacífica a beneficio del cuidado pastoral de las personas de la comunidad, expresó el vocero diocesano, Helkyn Enríquez Báez.