Orizaba.- Pese a la presencia de las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE), finalmente los pobladores de la comunidad de Chilapa, La Perla, no permitieron que tomaran conocimiento del deceso de un menor muerto, al caer a un pozo.
El personal del departamento de Servicios Periciales subió a la comunidad, ubicada en las faldas del Pico de Orizaba, pero a su arribo, los habitantes de Chilapa negaron entregar el cuerpo para que se le realizara la necropsia de rigor.
De acuerdo al reporte de la Policía municipal, se trataba de una menor de edad; sin embargo, trascendió que en realidad era un niño de dos años de edad.
Los pobladores intentaron en todo momento evadir la labor de las autoridades ministeriales y aseguraron incluso que el menor falleció debido a una pulmonía.
El fiscal de la FGE no dio fe del deceso y por lo tanto, tampoco hubo diligencias del personal de Servicios Periciales, ni mucho menos se abrió un expediente sobre el caso.