CD. Mendoza.– Durante 10 años la asociación Manos Celestiales que recibe y atiende a personas con capacidades diferentes de cinco municipios de la región, se sostuvo con escasos recursos propios y la indiferencia de los ayuntamientos que pasan por alto las necesidades y la posibilidad de apoyar al sector.
De acuerdo con la presidenta de la organización, Aida Merino Montero, pedir apoyo y gestionar recursos con los alcaldes es una pérdida de tiempo y una burla, porque juegan y “son de oídos sordos” ante las necesidades de las personas que necesitan rehabilitarse, integrarse a la sociedad y, principalmente, autoemplearse para generar ingresos y sobrellevar sus enfermedades físicas, motrices, visuales y auditivas.
“Ya no buscamos el apoyo porque luego nos dicen que sí y no hay nada, y aquí la gente necesita trabajo y comer, por eso tratamos que los chicos trabajen por sí mismos para que no nos engañen; para qué vamos a pedir ahí si podemos trabajar y tocar puertas. El apoyo viene más de la población que de las autoridades, gracias a la gente hemos logrado mucho”, expuso ante la prensa.
Ante la indiferencia de las autoridades y cansados de visitar los ayuntamientos sin obtener respuesta, indicó que desistieron de solicitarles ayuda; a partir de ahí, la fortaleza y el sostén económico para la agrupación que alberga a más de 50 personas con discapacidad y a adultos mayores de escasos recursos e indigentes, ha sido el apoyo y la buena voluntad de la población tras al tocar puertas en la región.
Aseguró que seguirán con su labor social.