LAGOS.- Al menos 70 personas murieron calcinadas después de que un camión cisterna chocara contra una estación de autobuses de la ciudad de Onitsha, en el estado de Anambra, al este de Nigeria, y causara un gran incendio y varias explosiones en cadena en un aparcamiento colindante, informaron medios locales.
El camión se dirigía ayer por la tarde a la ciudad vecina de Asaba, en el estado de Delta, cuando los frenos fallaron y el conductor perdió el control del vehículo, que acabó empotrado en la terminal y, al cabo de unos minutos, la gasolina vertida se incendió, lo que resultó en la explosión posterior.
Entre los muertos habría una mujer embarazada, varios niños, viandantes que estaban leyendo la prensa en un quiosco y numerosos pasajeros que se encontraban dentro de uno de los 15 autobuses que se quemaron en el incendio posterior al accidente, según explicó el periódico local Punch.
El comisario de Policía del estado, Hosea Karma, definió el accidente como una “tragedia”, pero no pudo ofrecer un recuento oficial de víctimas porque todavía se estaban trasladando a la morgue restos de los cadáveres encontrados entre las ruinas.
El director de la Cruz Roja Nigeria en la zona, Peter Emeka Kathy, aseguró a la prensa local que también se produjeron unos 30 heridos.