Naciones Unidas.- Los 15 miembros del Consejo de Seguridad de la ONU mostraron hoy su profunda división sobre el tema del tráfico ilícito de armas pequeñas y ligeras, que son las que causan la mayor cantidad de muertes de civiles en el mundo.
La resolución, propuesta por Lituania y respaldada por 56 miembros de la ONU, dividió a las potencias de Occidente y a sus aliados de Rusia y de los países africanos, los mayores opositores al proyecto y que se encuentran entre los que más sufren por el tráfico ilícito de armamento.
La iniciativa logró los nueve votos mínimos necesarios a favor, pese a la abstención de Rusia, China y Venezuela, así como de Nigeria, Angola y Chad, que pretendían incluir en el documento una referencia para censurar las transferencias de armas a “actores no estatales”.
Estados Unidos, Francia y Reino Unido, por su parte, se opusieron a la mención de “actores no estatales” debido al papel que desempeñan en la transferencia de armas a grupos armados en Siria.
El texto quedó como un reconocimiento de que “la transferencia ilícita, la acumulación desestabilizadora y el uso indebido de armas pequeñas y ligeras alimentan los conflictos y tienen repercusiones devastadoras en la protección de los civiles”.