Acatlán.- Tras una fuerte discusión, un sujeto mató a su rival dándole un machetazo en pleno cuello, el cual quedó prácticamente cercenado; al ver esto, los curiosos trataron de detener al homicida pero éste amedrentó a sus perseguidores apuntándoles con un arma de fuego, logrando escapar del lugar y dejando a su víctima desangrándose y agonizando en el piso de la cantina, donde se encontraba consumiendo licor.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 21:00 horas, cuando el ahora finado se encontraba en la cantina conocida como El Billar, acompañado de su hermano y un amigo, hasta que su agresor arribó al lugar, llevando en una de las manos el arma de fuego, y ocultando el machete en su espalda con la otra mano.
Al encontrarse a sólo unos metros de su enemigo, le gritó: “ahora sí te va a cargar la ch…”; intentando persuadir al asesino, uno de los presentes le aventó una botella de cerveza, distracción que fue aprovechada por el hoy occiso para intentar irse encima de su enemigo para desarmarlo gritándole: “pues ponle como quieras”, pero para su mala suerte, el homicida reaccionó, y con el machete le pegó a la altura de la garganta, provocándole una herida de muerte.
Al momento, el campesino cayó agarrándose el cuello, en un intento de aferrarse a la vida, pero ésta lo abandonaba poco a poco; el hermano del herido, de nombre Margarito Guzmán Nolasco, de 36 años de edad, junto con otras personas, intentaron detener al responsable pero éste los amedrentó con su pistola, y se dio a la fuga con rumbo desconocido.
Personas que atestiguaron el artero crimen dieron aviso a la Policía municipal para que detuvieran al asesino, por lo que al lugar se trasladaron varias unidades policiacas.
El lugar de los hechos se encuentra ubicado aproximadamente a una hora y media de la cabecera municipal, dificultándose el acceso debido a la oscuridad de la noche, y a que el camino es de terracería.
Por lo anterior, al llegar las autoridades y peinar la zona en busca del asesino, ya no fue posible localizararlo, pues el agresor tuvo suficiente tiempo para huir de la escena del crimen, por lo que dieron parte a las autoridades ministeriales, quienes acudieron a tomar conocimiento de los hechos y ordenaron el levantamiento del cuerpo para su traslado al anfiteatro, donde se le practicaría la necropsia de rigor.
El finado respondía al nombre de Álvaro Guzmán Nolasco de 32 años de edad, con domicilio conocido en la comunidad de Torreón, municipio de Acatlán de Pérez Figueroa, Oaxaca, donde se desempeñaba como campesino; fuentes extraoficiales mencionaron que el difunto mantenía problemas con su victimario, a quien tenía denunciado por el delito de lesiones, motivo por el cual estuvo preso durante varios meses.
Habiendo obtenido su libertad, y al saber que Álvaro estaba bebiendo licor en la cantina El Billar, el homicida, identificado como Carmelo Gutiérrez Moguel, llegó al lugar para ultimar a su enemigo, en lo que se presume podría haberse tratado de una venganza; autoridades buscan afanosamente al ex convicto que dio muerte al campesino para que responda por el brutal hecho, en tanto que el cuerpo era velado por sus familiares, quienes exigen justicia y que el asesino pague su delito conforme a la ley.
Julio Valdivia
El Buen Tono