La Realidad de Huellitas

CÓRDOBA.- Flora Sánchez Flores comienza su labor a las 6:00 de la mañana. Es la encargada de la limpieza de la sede de Huellitas. A sus 57 años, Flora cumple diariamente con mantener limpias las instalaciones barriendo, lavando y desinfectando la oficina, el área de perros y gatos, que habitan por separado, así como el patio, los cobertores y trapos que utilizan para estos animalitos. Flora realiza esta actividad varias veces al día, para mantener Huellitas en condiciones salubres.

 

Además de conservar limpia el área en donde conviven decenas de perros y gatos que fueron desamparados y encontraron aquí un hogar, cuidado y cariño, Flora se encarga también de cocinar su alimento, a base de arroz, pollo y verduras, ya que es la única forma de mantenerlos bien alimentados y sobre todo nutridos, pues no hay recursos suficientes para croquetas de buena calidad, las cuales son las que se necesitan para reponer las condiciones físicas de estos animalitos, que llegan siempre en muy malas condiciones. “Hacemos hasta lo que no te imaginas, pero los perritos y los gatos comen todos los días”, nos menciona.

 

La sustancia más importante, para la labor de Flora, es el agua. Para lavar pisos, pasillos, corredores, jaulas y demás espacios de Huellitas. Pero también para cocinar el agua es indispensable. Sin el vital líquido estarían en riesgo la salud, pero también la vida de todos estos animalitos. Huellitas es la única Asociación Civil que brinda hogar, cariño, alimento y salud para animales en Córdoba. Fue fundada en 2005 y su representante desde sus inicios es Guillermo Andrade Díaz, quien con grandes esfuerzos realiza diferentes actividades de labor social para reunir recursos y así ayudar a los ingresos de Huellitas.

 

Guillermo sabe que desde que fue fundada la Asociación Civil, el Gobierno municipal siempre aportaba un donativo de 12 mil pesos cada mes, para cubrir los salarios del veterinario y personal de limpieza, además de cubrir los gastos de agua y luz, lo cual dejó de suceder en diciembre del año pasado. A partir de enero del presente año, no reciben ni un solo peso por parte del Ayuntamiento y precisamente el actual Presidente municipal, Tomás Ríos Bernal, prometió ayudar con las necesidades de esta Asociación, incumpliendo su promesa, pero también su compromiso como Alcalde de apoyar la labor altruista de esta organización que realiza, desde hace 10 años, lo que los gobiernos no han querido, ni han podido hacer, que es proporcionar resguardo y alimento a perros y gatos abandonados.

 

La secretaria particular, “Gely” Sahagún Morales, recibe documentos con las peticiones de Huellitas, y las archiva. Nunca hay respuesta.

Así que actualmente Huellitas se encuentra con una serie de necesidades, mayores a las de otros años, y continúa con su labor en beneficio de Córdoba. Y si bien el Gobierno de Tomás Ríos ya no la apoya, insiste en estorbarle. Porque ahora que Tomás Ríos ha decidido dejar de pagar el agua a Hidrosistema, cuyo consumo se da en un predio propiedad del Municipio y se mide a través de un medidor que identifica al municipio como propietario, la dependencia ha decidido cobrar el agua, y de no pagarse este servicio, cortará el suministro de agua potable a la Asociación Civil.

 

De acuerdo con los recibos que Hidrosistemas envía para el cobro a Huellitas, el consumo mensual de agua, más los cargos por drenaje y demás, es de 364 pesos mensuales. Sin embargo, y a pesar de que desde enero el Gobierno municipal no paga el consumo, en estos tres meses el recibo acusa un rezago en el cobro, ¡por 24 mil 549 pesos!

Lo que pretende cobrar Hidrosistemas es equivalente a 67.4 meses, es decir, casi seis años. Así es el abuso y la extorsión que estas autoridades ejercen sobre una Asociación Civil que sólo ha ayudado y sigue ayudando a Córdoba todos los días. Si no paga, les cortarán el agua. 

 

Pero hay más. En la nómina que mensualmente paga el Gobierno de Tomás Ríos, se incluye a Luis Juan Gutiérrez Díaz, con un salario mensual de 15 mil pesos. El puesto y el salario corresponden al encargado del Antirrábico de la Coordinación de Salud y el perfil, por supuesto, es para un médico veterinario, como también veterinario es el propio Alcalde que odia a los perros y a los gatos y quiere verlos muertos de hambre o en la calle.

 

¿Qué hace Luis Juan Gutiérrez Díaz, encargado del Antirrábico en Córdoba, si en Córdoba no hay antirrábico? Cuando existió el Antirrábico, estaba precisamente en el lugar en donde desde hace 10 años está Huellitas, haciendo el trabajo que no hace el Gobierno municipal. Por supuesto, el tal Gutiérrez Díaz ni siquiera conoce Huellitas. Si lo conociera, sabría que ahí hay un consultorio, en donde el veterinario pagado por el Gobierno municipal debería estar, todos los días, atendiendo animales. 

 

Hasta la administración pasada, un veterinario atendía el consultorio de Huellitas y el Ayuntamiento le pagaba tres mil pesos mensuales. A partir de la llegada del veterinario Tomás Ríos, que odia a los perros y a los gatos y quiere verlos muertos o en la calle, la plaza de veterinario se canceló, y se creó otra, de 15 mil pesos mensuales, para darle un sueldo a Luis Juan Gutiérrez Díaz. Le dieron sueldo, pero no trabajo. Es un aviador más de la administración de Tomás Ríos, pagado por el pueblo para no hacer nada.

 

El consultorio, allá en Huellitas, está cerrado, siempre bajo llave. Y la llave, adivinó usted, la tiene el Gobierno municipal, pues a ese espacio no dejan entrar a la gente de Huellitas, los que todos los días atienden a decenas de perros y a decenas de gatos, pero en el suelo del patio, pues el consultorio lo tiene bajo llave el Gobierno de Tomás Ríos.