Orizaba.- Unas 10 mil personas fueron testigos de la Ordenación Episcopal del tercer Obispo de Orizaba, don Francisco Eduardo Cervantes Merino, acompañado por alrededor de 20 obispos y arzobispos, así como sacerdotes, religiosas y laicos.
La Plaza de Toros la Concordia lució un lleno total. De los distintos ambientes los contingentes fueron ubicados, lo mismos que unos 60 reporteros, fotógrafos y camarógrafos de medios locales, estatales y nacionales que llegaron para cubrir la solemne ceremonia que tardó aproximadamente
unas tres horas.
El nuncio apostólico, Christophe Pierre, confirió la Ordenación Episcopal, los co-consagrantes fueron el arzobispo de Xalapa Monseñor Hipólito Reyes Larios y el obispo de Tuxpan, Juan Navarro Castellanos, mientras que la homilía estuvo dirigida por el obispo emérito de Querétaro, monseñor Mario de Gasperín, quien recordó al obispo que recibir el anillo signo de fidelidad, es pertenecer fiel a la Iglesia santa de Dios, Cristo, que pone en manos del ahora obispo el cuidado de su esposa, la Iglesia y asume el compromiso de reflejar en sí mismo el amor virginal de Cristo por todos sus fieles.
Para cumplir esta encomienda Cristo regala sus dones; sus cinco yagas se han transfigurado en gloriosas: el perdón, el premio de Jesús a Pedro; pastorea mis ovejas. El tercer regalo es la Eucaristía, que desde el cielo custodia la jovencita Leonor Sánchez, mártir y gloria de esta Iglesia.
El cuarto regalo es la maternidad espiritual de María, y finalmente el don de los dones, el Espíritu Santo que desciende sobre Monseñor.