Beirut.- Decenas de personas han muerto ayer martes en Siria, tras un bombardeo aéreo con armas químicas. La ONG médica Uossm, fundada en 2012 en Francia, asegura que en el ataque contra la localidad de Jan Sheijun, en la provincial de Idlib y bajo control de fuerzas rebeldes, han muerto un centenar de personas. El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), con sede en Londres, pero con una amplia red de informantes sobre el terreno, cifra los fallecidos en 58 personas, incluidos 11 niños, y asegura que el bombardeo fue perpetrado desde el aire, sin precisar si se trató de aviones del Gobierno de Bachar el Asad o de Rusia.
El Consejo de Seguridad de la ONU se reunió de urgencia ayer para analizar lo ocurrido a petición de Francia y Reino Unido. Estados Unidos, Francia y Turquía han condenado el ataque, el más mortífero relacionado con armas químicas desde 2013, y han responsabilizado a El Asad de lo ocurrido. El ataque pone en entredicho el proceso de paz que intenta poner fin a siete años de guerra en el País.
“Hay más de 80 muertos y 400 personas afectadas por el gas tóxico con problemas respiratorios y vómitos. La mayoría mujeres y niños porque el ataque tuvo lugar a las 06:00 horas (07:00 hora peninsular) cuando dormían”, aseguró por Whatsapp Abu Alaa, conductor de ambulancias encargado de la evacuación de heridos.